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viernes, 13 de septiembre de 2013

«Thigh Gap», la nueva obsesión adolescente por el culto al cuerpo

El «Thigh Gap» consiste en que los muslos no se junten, algo que solo es consecuencia de la morfología de cada uno.

La última obsesión juvenil para conseguir tener un «físico perfecto» se llama «Thigh Gap». «Se trata de una ‘moda adolescente’ que afecta al cuerpo y por consiguiente a la mente. En este caso, se trata de tener separación entre los muslos de manera que no se toquen», explica Carolina Compés Luque, Psicóloga y Responsable de Equipo en Residencia Terapéutica Infanto-Juvenil.
El origen del «Thigh Gap» no está del todo claro y se trata de un fenómeno muy reciente, pero los expertos sitúan sus inicios en el desfile del año 2012 de los ángeles de Victoria’s Secret. A partir de ese momento, las jóvenes han ido fijándose en cantantes, actrices y demás ídolos juveniles cuyos muslos entre sí no se tocan.
Basta con hacer una búsqueda en Google para comprobar la obsesión de las adolescentes por conseguir este efecto físico. Numerosos vídeos en Youtube o imágenes en la plataforma de microblogging Tumblraniman a conseguir ese «Thigh Gap» tan deseado e incluso ofrecen ejercicios y trucos para lograr dicha separación.
«Es peligroso», señala Lourdes Garoz, psicóloga. Las jóvenes «suben a internet vídeos prometiendo métodos infalibles para conseguir esa separación. Las adolescentes comienzan a realizarlos y al no conseguir el resultado deseado piensan que ha sido por falta de voluntad o de esfuerzo, lo que les lleva tener un sentimiento de frustración y de fracaso», explica.

Precaución con internet

En este sentido, Carolina Compés hace especial hincapié: «Tenemos que distinguir entre el uso y el abuso que hacemos de las nuevas tecnologías». Este exceso de peligrosa información que corre por la red y a la que cualquiera accede puede convertirse en algo patológico.
Y es que «Thigh Gap» no es solo una moda, sino que puede ir asociado a un trastorno alimentario, tal y como alerta Compés. «Si bien es cierto que en la clasificación de trastornos no aparece el nombre de ‘Thigh Gap’ como tal, sí coinciden algunos criterios que podrían estar asociados a él y que podrían dar señales de un trastorno alimentario».
De hecho, tal es la obsesión de las chicas por conseguir que sus muslos no se toquen que «están dispuestas a hacer dietas muy restrictivas y ejercicios absurdos para intentar cambiar algo que es consecuencia de la morfología de cada cuerpo», señala Garoz. «Por mucho que lo intenten, podrán mejorar su aspecto físico pero nunca llegarán a tener los muslos separados porque no depende de la delgadez», asegura. De hecho, muchas de la imágenes que circulan por la red de supuestos «Thigh Gap» de famosas no son reales. En la mayoría de las ocasiones, dichas instantáneas están manipuladas.

La presión social


Pero no todo es culpa de internet o de las redes sociales. «Pueden ser muchos los motivos que llevan a una adolescente a esta obsesión», explica Compés, quien recuerda la influencia de la sociedad por y para la imagen. «Todos hemos oído hablar de cómo han ido cambiando los cánones de belleza pero pocos somos realmente conscientes de la influencia que estos tienen, especialmente sobre nuestros menores», recuerda.
«En estas edades todavía no está instaurada una identidad y una imagen corporal estable», explica también Lourdes Garoz. «La delgadez ya no es solo por gustar al otro sexo sino que sirve para competir entre las adolescentes y las mujeres», asegura.
Ambas expertas consideran fundamental que los padres de hijos adolescentes estén alerta. A pesar de ser una etapa complicada, cualquier cambio importante que noten en lo que a alimentación se refiere, lo mejor será contactar con profesionales como ADANER, la Asociación en Defensa de la Atención a la Anorexia Nerviosa y Bulimia.

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